Dice el acervo popular que las sinfonías impares de Ludwig Van Beethoven son majestuosas y grandilocuentes, mientras que las pares se mueven en terrenos más envolventes y felices. Una característica que se hace casi palpable con la Cuarta, situada entre la conocida como ‘La Heroica’, la tercera, y la tempestuosa Quinta Sinfonía. Esta suerte reposada ha sido la elegida por la Orquesta Ciudad de Almería (OCAL) para su nuevo concierto del ciclo ‘Beethoven Plus. El Genio de Bonn’, que se ha celebrado este mediodía en el Auditorio Municipal Maestro Padilla, en el marco de la programación de primavera del Área de Cultura y Educación del Ayuntamiento de Almería.
Dirigidos con la maestría habitual y reconocida de Michael Thomas, la OCAL ha interpretado la pieza que Beethoven compusiera y dedicara al conde Franz von Oppersdorff en 1806, una obra dividida en cuatro movimientos, todos ellos en forma de sonata, salvo el tercero, un scherzo libre y más enérgico.
Tras un adagio inicial algo más oscuro, la OCAL ha sabido trasladar la paz y calma con la que dotó a las melodías principales de la Cuarta Sinfonía, cuya composición coincide con un periodo tranquilo de la vida personal del autor, cuando el reconocimiento a su obra era mucho mayor, lo que le permitía por un lado prescindir de los compromisos en los salones de la corte y, por ello, a abrazarse a una creatividad en pleno rendimiento, dado que empezaba intuir que la pérdida de oído acabaría siendo total con el paso de los años.
El público que ha llenado el Auditorio ha respondido con una cálida ovación a la interpretación de la Orquesta que antes había abierto la sesión con la alegre obertura de ‘Las Criaturas de Prometeo’ de la primera época de la obra de Beethoven, todavía de tintes mozartianos, y que ha interpretado el ‘Concierto en modo galante’ de Joaquín Rodrigo, con la inestimable participación de Asier Polo como violonchelista solista. El compositor español Joaquín Rodrigo la compuso en 1949. La obra fue un encargo del chelista Gaspar Cassadó, que terminó convenciendo a Rodrigo después de que hubiera desterrado la idea de escribir más conciertos tras los muy conocidos de Aranjuez, el Heroico o el del Estío.
La composición alterna el tono alegro, popular y humorístico conocido por Rodrigo, que se inspiró en la España del siglo XVIII para ello, con otros pasajes más líricos, para recoger con un Rondó muy del gusto de Boccherini, una de las sus reconocidas influencias.
Galardonado con el Premio Nacional de Música 2019, Asier Polo es considerado el chelista español más destacado de su generación. Su participación la ha cerrado con un bis con el preludio y fantasía de la ‘Suite para violonchelo solo’ de Gaspar Cassadó.
Asier Polo ha colaborado con las principales orquestas españolas e internacionales, destacando la Philharmonia Orchestra, Orchestra Sinfonica Nazionale della RAI, Dresdner Philharmonie, Orchestre de Paris, Bergen Filharmoniske Orkester, Israel Philharmonic Orchestra, Deutsche Symphonie-Orchester Berlin, Sinfónica Nacional (México), Orquestra Sinfônica do Estado de Sâo Paulo o la Sinfonieorchester Basel bajo la dirección de destacados directores como: Frühbeck de Burgos, Claus Peter Flor, Juanjo Mena, Pinchas Steinberg, Günther Herbig, Antoni Wit, Anne Manson, Carlos Miguel Prieto, entre otros.
Actualmente es profesor en el Conservatorio della Svizzera italiana (Lugano), en el Centro Superior de Música del País Vasco “Musikene” y Director Artístico del Forum Musikae (Academia internacional y Festival de Música).