Sonaron los primeros acordes de la banda sonora de ‘La Bella y la Bestia’ y se palpaba en el ambiente toda la ilusión infantil. Los niños, disfrazados como sus personajes preferidos, habían conseguido llenar el patio de butacas del Auditorio Maestro Padilla. Diputación de Almería, en el programa de FICAL, incluyó el concierto ‘Freaky – Family Concert’, que reunió en un interesante repertorio, las partituras más emblemáticas del cine juvenil.
Poco antes de comenzar, el director de la OCAL, Michael Thomas, destacaba la importancia de celebrar este tipo de actividades para “que los niños se sientan cercanos a sus personajes preferidos”. Asimismo, quiso resaltar el buen trabajo que han estado realizando y que pondrían sobre el escenario poco después, los miembros del Coro Infantil Pedro Mena de Adra. Los solistas fueron Marta Figueredo Ruiz, David Tarifa Vázquez, Lucía Vonhagen Limonchi, Claudia Morales Moreno y Antonio Valverde.
Se apagaron las luces, y se encendió la imaginación. Los acordes del tema principal de la saga ‘Star Wars’ sirvió para que los músicos aparecieran sobre las tablas. Tranquilos, con la sombra de Darth Vader planeando sobre su particular Halcón Milenario. Fuerte ovación y sonidos de instrumentos afinándose.
Poco después, con todo a punto, haría su aparición Michael Thomas, enarbolando una enorme sonrisa y un abrazo invisible de agradecimiento a todos los asistentes. Y, al fin y al cabo, FICAL es la fiesta del cine. La gran pantalla situada detrás de la orquesta empezaba a proyectar algunas imágenes de la película ‘La Bella y la Bestia’ con la que se abrió el recital.
La acción subía y bajaba, igual que en cualquier película. Sonido de batalla, romanticismo, acción, héroes descolgándose por los grandes edificios de Manhattan. La fiesta de la música avalada por la Diputación de Almería seguía con las obras ‘Aladdin’, ‘El señor de los anillos’, ‘Frozen’, ‘Los Vengadores’, ‘Moana’ y ‘Star Wars’.
Sin duda, uno de los momentos más esperados fue cuando, en la imaginación de todos los asistentes, el patio de butacas se convertía en el salón de Howarts y aparecía Harry Potter en la mirada de cada uno de los niños ataviados con la capa negra y la corbata a rayas. Paco, un gran fan, incluso se había llevado un búho de peluche.
Dráculas de Transilvania, caballeros medievales, princesas, Blancanieves, la valiente guerrera Mulan, todos los protagonistas de ‘The Avengers’, y una familia disfrazada de los personajes de ‘La Bella y la Bestia’ desfilaron por el photocoll de FICAL para llevarse a casa el mejor de los recuerdos.
Precisamente a esto hizo referencia Michael Thomas que se mostró encantado de que buena parte de los asistentes hicieran gala de una gran creatividad y se decidiera a acompañar a la OCAL con espectaculares disfraces. “Estamos viendo una respuesta del público muy buena”. “Hoy en día hacen falta más eventos como este. La gente tiene que divertirse porque no estamos en momentos de escuchar música deprimente. Necesitamos todo lo contrario”.
Algo había que hacer para aunar el espíritu familiar con el cine. Las ganas de salir, de jugar, de estar con los amigos, con la espectacularidad y el trepidante movimiento de la música orquestal. Por eso, dentro del programa de FICAL destacaba esta actividad enfocada a un público infantil, pero también a los adultos.
Los asistentes emprendieron un viaje que comenzó a las doce en punto de la mañana y les llevó con los ojos cerrados y acunados por las notas musicales de a OCAL, desde Hogwarts hasta Motunui con parada en Agrabah y en el París donde Bella consiguió ablandar el corazón de la Bestia.